Un sector como el de la hostelería, no puede quedarse atrás en cuestiones de tecnología. Si bien es cierto que se trata de un sector que basa su trabajo en el trato humano y el servicio al cliente, la ayuda tecnología no está de más para que sus funciones se desempeñen con mayor eficiencia. Un camarero siempre será un camarero, no hay sustituto posible, pero si al camarero se le ayuda a la hora de tomar las comandas, con algo más que libreta y lápiz, los pedidos serán más agiles. Del mismo modo, el cocinero es esencial, pero si le ayudas con la maquinaria más avanzada para que sus platos no se quemen, queden fríos, o los alimentos se mantengan en buen estado, ganamos todos.

Que un sector como el hostelero se beneficie de los avances de la tecnología es algo que benéfica a todos los consumidores. Sin embargo, se trata de algo desconocido para muchos. Lo más habitual no es plantearse si el restaurante de la esquina o la tienda de alimentación que sirve el género, cuenta con las mejores cámaras frigoríficas, por citar un ejemplo. Por eso, nos hemos hecho eco en este artículo para hacer ver como la tecnología, también se encuentra en el sector de la hostelería.

Empresas de renombre en el sector de la maquinaria y equipamiento específico para hostelería y alimentación, como es el caso de May Friho, aseguran que a mayor tecnología, mayor eficiencia y, por supuesto, mejor calidad en el servicio. Esto es aplicable no solo en hostelería y restauración, también lo es en el sector de la alimentación, donde el mantenimiento de los productos y alimentos en buen estado, es primordial. En este sentido, el futuro del equipamiento de hostelería, es parte del presente y, aunque la tecnología de cocción, por ejemplo, sigue evolucionando y adaptándose a las necesidades de la cocina profesional actual, hay que mantenerse al día en innovación tecnología.

La restauración como punto clave de aplicación tecnológica

Como decimos, la tecnología de la cocción evoluciona para adaptarse y ofrecer un mejor servicio. Para los restaurantes, la tecnología aplicada a la cocina es esencial. Con los avances, los restaurantes, siguen siendo competitivos pues pueden mejorar la calidad de sus platos y ser más eficientes en la cocinas. La tecnología centra sus esfuerzos en mejorar todas las necesidades de una cocina: eficiencia energética, automatización, seguridad y, por supuesto, personalización.

Uno de los puntos fuertes de toda evolución tecnológica, reside en la eficiencia energética. Este aspecto es fundamental en cualquier cocina que se precie, sea dentro de la hostelería o en una vivienda. Los mismos consumidores, demandan y exigen las prácticas sostenibles a las empresas en las que compran, por lo que restaurantes y hoteles, deben sumarse al carro de la sostenibilidad.

Razones más que de sobra para que los hosteleros, adquieran equipos mas eficientes energéticamente hablado y opten por los electrodomésticos de bajo consumo. Algo que las industrias han tenido en cuenta y ofrecen todo este tipo de maquinaria a precios más asequibles y con mayor eficacia.

Los aparatos de cocina eficientes, son una de las mejores maneras que tienen las empresas y locales de restauración para minimizar el gasto energético en la medida de lo posible. Estos aparatos, como bien sabemos, reducen el consumo sin comprometer el rendimiento. Puesto que en una cocina se cuenta con electrodomésticos y maquinaria para cocinar, mantener, refrigerar, limpiar, etc. contar con equipos de trabajo eficientes, reduce los costes.

Uno de los ejemplos más notables, lo encontramos en la tecnología que se aplica a la maquinaria de cocción por inducción. Estas placas de inducción son los aparatos de cocina más eficientes en términos de energía, en comparación con las cocinas de gas o la vitrocerámica. Este tipo de avances puede beneficiar a todos los profesionales, puesto que en las cocinas y barras de restaurantes, bares y cafeterías siempre encontraremos neveras para bebidas, máquinas de hielo, dispensadores de bebidas, cocinas, congeladores, freidoras, microondas, parrillas, planchas, hornos, entre otros muchos utensilios.

Para encontrar los equipos más eficientes, basta con buscar los que cuentan con la etiqueta que determina su nivel de eficiencia.

Otra de las novedades tecnologías que cada vez se acercan más al sector de la hostelería es la Inteligencia Artificial, junto al Internet de las Cosas, esta tecnología, ha logrado que el sector, se reinvente. Aunque todavía queda un largo camino por recorrer en este sentido. Los aparatos inteligentes ayudan a gestionar la productividad, mientras que el IoT, permite controlar los aparatos a distancia, programarlos y transferir los datos de una maquinaria a otra y volcarlos en una aplicación para facilitar la gestión. Este tipo de electrodomésticos, facilitan la seguridad alimentaria, el mantenimiento y por supuesto, la realización del inventario.

Con las unidades de refrigeración inteligentes más vanguardistas, es posible controlar la temperatura y alertar en caso de que los niveles de seguridad se superen. Una máquina de hacer hielo inteligente, avisa cuando necesita agua o está lleno el depósito. Mediante el IoT, es posible que se realice un seguimiento detallado de todo lo que entra y sale del inventario. Conectando las balanzas inteligentes, es posible recibir lecturas precisas sobre el producto que queda en el almacén, minimizando el exceso y evitando la carencia, sin necesidad de contabilizar las existencias de forma constante.

Automatización y robótica, presente y futuro

Los equipos desarrollados para la cocina comercial están siendo automatizados en gran medida. Esto constituye un cambio de tercio futurista en el sector de la hostelería. Este tipo de aparatos permiten una automatización de las tareas que se llevan a cabo en un restaurante, lo que conlleva una reducción del tiempo de producción y una notable mejora en el control de la calidad. Por citar un ejemplo, los aparatos de cocina inteligentes, pueden utilizar sensores precisos y proporcionar una notificación en el momento en que los alimentos estén cocinados y el plato listo.

Si se producen platos y menús de gran calidad, se mejora la experiencia del cliente, puesto que se sirve en su punto justo de cocción. Además de que contar con una cocina automatizada, permite a los chef disponer de más tiempo para elaborar otros pedidos, experimentar con nuevas recetas o desarrollar nuevos menús.

Por otro lado, ya están implementados en muchos restaurantes los quioscos de autoservicio. Este gran avance, se ha convertido en un básico de muchos restaurantes, sobre todo de cocina rápida. Los quioscos permiten a los clientes realizar sus pedidos en una pantalla interactiva. Esta información se envía directamente a la cocina y permite que el personal elabore el pedido en el menor tiempo posible y siempre en función de las preferencias del cliente.

Un quiosco de autoservicio ofrece numerosas ventajas tanto a clientes como a propietarios: menor coste en mano de obra, menor tiempo de espera, seguimiento eficaz de los pedidos, mayor volumen y precisión en la toma de los mismos.

Permiten un funcionamiento más ágil del restaurante y mejora la capacidad del equipo de trabajo, así como la experiencia del cliente.

Lo último en tecnología basada en Inteligencia Artificial que podemos encontrar en las cocinas, son los robots cocineros que pueden realizar diversas tareas, desde cortar verduras hasta mezclar ingredientes. Estos pinches de metal, pueden ser programados con recetas e instrucciones precisas para que preparen los platos sin necesidad de ayuda humana. Aunque esto todavía no es habitual y esperemos que el esfuerzo y el valor humano no se vea suplido por este tipo de maquinaria por eficiente y precisa que sea. Lo mejor es aunar el trato humano con la automatización adecuada para que se mantenga un equilibrio y se gane en eficiencia, sin perder el valor humano.

Por último, alguna de las innovaciones tecnológicas aplicadas a la seguridad alimentaria y la higiene. Aspectos tan importantes como los citados anteriormente. Puesto que la higiene es fundamental y constituye una de las principales preocupaciones del sector, los avances en seguridad alimentaria ha contribuido a minimizar las lesiones en el lugar de trabajo, así como las enfermedades transmitidas por los alimentos.

Con la finalidad de evitar la proliferación de bacterias en los equipos que están en contacto continuo con los alimentos, se utilizan superficies antimicrobianas como porta utensilios, encimeras e incluso electrodomésticos. Un ejemplo claro, lo encontramos en los utensilios y elementos de cobre que combaten los microbios de forma automática. Otro ejemplo son los dispensadores sin contacto que permiten reducir el riesgo de contaminación.

Por otro lado, la limpieza con agua electrolizada es uno de los sistemas que mayor popularidad están cobrando, debido a que pasan una corriente eléctrica por el agua para destruir todo tipo de contaminantes que pueda haber en cubiertos, utensilios y materia prima. De esta manera se elimina la necesidad de utilizar productos químicos agresivos, al tiempo que minimiza el gasto energético.

Todos estos avances tecnológicos son cada vez más accesibles y fáciles de encontrar  en cualquier cocina del sector. Aunque existen algunas otras novedades de las que hablaremos en otra ocasión, puesto que la evolución tecnológica no tiene fin y cada día se trabaja más en innovación para alcanzar la excelencia en todos los sectores, entre los que se incluye como ya ha quedado patente, la hostelería.